Justin Bieber ha pasado la Navidad con su familia pero en la cabeza no tenía otra cosa que lo mal que lo estaban pasando en casa de su novia. Según parece, la pareja se pasa las horas colgados del teléfono ya que Justin no quiere otra cosa que no sea consolar a su novia.
Selena Gomez, en Texas, a miles de kilómetros ha tenido las peores navidades posibles después de que la semana pasada su madre, Mandy Dawn Teefy, sufriera un aborto del bebé que estaba esperando y que iba a ser el primer hermanito de Selena.
Selena, hasta ahora hija única, esperaba ese niño con mucha ilusión y la noticia de la pérdida del bebé ha sido un duro golpe del que la cantante aún no se ha recuperado. Selena canceló tras conocer la noticia sus conciertos pendientes y desde entonces aún no se ha pronunciado en Twitter, donde hasta ahora escribía casi a diario mensajes para sus fans.
La tristeza que invade a la familia Gomez estas navidades quedó patente esta semana, cuando un paparazzi captaba imágenes de Justin Bieber llorando en su coche cuando salía de la clínica donde la madre de Selena Gomez estaba ingresada.
Selena acompañaba este jueves a su novio a la final de ‘The X Factor’. Sin embargo, la joven no se dejó prácticamente ver ante las cámara.
Gente10
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